Había escuchado varias veces de amigas que se habían enamorado por internet, pero a mi me parecía una cosa absolutamente improbable, pero ya que mi resolución de este año incluía buscar a mi Príncipe Incoloro decidí inscribirme en una página de solteros, antes un fin de semana entré a varios chats y forums para ver que tan complicado era la cosa, y encontré la misma dificultad que se encuentra en las relaciones en vivo y en directo y es simplemente en las ganas de ser honestos, pues es tan fácil engañar mirando a la cara como mirando las teclas de un ordenador (como se diría en España), así que bueno ya conocedora de algunas mentirillas pensé que me sería tan fácil como en la vida real, así que opté por intentarlo.
Un día me inscribí y llené mi perfil, lo difícil fue describir al Príncipe Incoloro, algunas preguntas no las contesté. Al día siguiente leí varios perfiles, miré muchas fotos, pero no me animé a escribirle a nadie.
Al siguiente día vi un perfil que llamó mi atención dos coincidencias con mi perfil: segundo de cinco hermanos y abogado ahhh también teníamos la misma edad; luego miré sus fotos y me pareció tan serio en ninguna de ellas sonreía... y leí lo que él buscaba en una mujer, no decía nada distinto a otros que había leído, pero al final de la descripción de su mujer ideal decía: "y que le guste el helado"... me causó tanta gracia, me pareció un detalle juguetón, coquetón entre tanta seriedad, y me animé esa noche escribí unos 5 correos, los otros 4 perfiles que me habían llamado la atención eran más bien por anhelos profundos del alma, así que mis correos eran un poco extensos en ellos contaba también de mis anhelos de santidad, de mi insatisfacción de las cosas que ofrece el mundo y en alguno incluso contaba de algún encuentro espiritual muy intenso que tuve una vez en un Santísimo, pero al chico del helado fueron solo unas 4 líneas en las que solo le decía mi nombre y que quizá podríamos ser amigos y claro el remate ideal "podríamos ser amigos, aunque no me gusta el helado". Y no es broma, no es que no me guste, pero aun no sé cuando es que dejé de comer dulces, en fin...
Ese correo lo envié el 15 de enero de este año, y anoche ya conversaba con él sobre el anillo, la pedida de mano, el compromiso, su padres, los míos y etc.
Primero que nada para mi descubrir la web, me confirmó que hay otras personas con anhelos parecidos a los míos, personas que consideran que el matrimonio es para siempre aunque sea muy difícil, que perdonar es posible y tener hijos es una gran responsabilidad y un don divino.
Han pasado tantas cosas en mi interior desde el 15 de enero, he vivido tan intensamente estos meses, que a veces recordando me emociono y se me acelera el corazón, aun no puedo creer que el amor exista y sea tanto tanto tanto.
Comenzamos a escribirnos nos mandábamos correos, yo esperaba siempre su respuesta antes de enviarle otra carta; a las 2 semanas de mandarnos un correo se fue de vacaciones con su familia; y no me animaba a escribirle, a veces lograba ver que él entraba a mirar su correo, lo veía activo, pero no me escribía y yo tampoco a él, me daba como roche hacerlo, hasta que un día no me aguante más tenía como 5 días sin saber de él y le escribí contándole mi día de oficina, algunas cosas, nada particular, y él me contestó cortito y me decía "yo también te he extrañado".... y yo me aterré, leí mi carta la releí buscando cuando le dije "te extraño" y felizmente no encontré esas palabras en ninguna parte, pero él lo sabía algo de lo que escribí o quizá la forma en que le escribí le hizo notarlo, y fue como el destape a una forma nueva de relación, una en la que uno dice efectivamente lo que siente en cada momento.
Al poco tiempo compré mi web cam, y luego mi lap top, pues entre mi mami y mis hermanos nos turnábamos la compu, y pues llegó un momento en que yo quería hablar con él cada noche, así que la necesidad me hizo buscar mayores comodidades para esta relación.
Un día me dijo que quería venir a verme, que quería conocerme y que cerca de mi cumpleaños le parecía ideal, así que unos pocos días de mi cumple fui a recogerlo al aeropuerto, el primer encuentro no fue todo lo que esperábamos, pero ya más tranquilos en un café ese mismo día, nos dimos nuestro primer besito y nos dijimos cuánto nos queríamos.
Parece simple ahora en el papel, pero son miles de sentimientos y de pensamientos encontrados en mi; de las cosas que más me preocupan son mis temas laborales, me preocupa ni satisfacción profesional, me preocupa la distancia que habrá con mi familia, pero amo tanto a Carlos que sé que podré con todo eso, por una simple razón él es mi compañero, él es el hombre con el que he decidido pasar el resto de mi vida, con el que he decidido formar una familia y con el que quiero ser santa.
Respecto a sus colores, pues es blanco cuando está fresco(digamos que recién bañado), es poco uniforme cuando lo lleno de mis amigos, es rosado cuando recién sale del avión, es rojo luego de subir las escaleras de 7 pisos; es de un color indescifrable cuando no me entiende, del color más lindo y tierno del mundo cuando se engríe, de color intenso cuando me mira con sus ojazos y me dice te amo... aun hay miles de colores suyos que no conozco, pero los voy descubriendo con paciencia y con cariño.
Un día me inscribí y llené mi perfil, lo difícil fue describir al Príncipe Incoloro, algunas preguntas no las contesté. Al día siguiente leí varios perfiles, miré muchas fotos, pero no me animé a escribirle a nadie.
Al siguiente día vi un perfil que llamó mi atención dos coincidencias con mi perfil: segundo de cinco hermanos y abogado ahhh también teníamos la misma edad; luego miré sus fotos y me pareció tan serio en ninguna de ellas sonreía... y leí lo que él buscaba en una mujer, no decía nada distinto a otros que había leído, pero al final de la descripción de su mujer ideal decía: "y que le guste el helado"... me causó tanta gracia, me pareció un detalle juguetón, coquetón entre tanta seriedad, y me animé esa noche escribí unos 5 correos, los otros 4 perfiles que me habían llamado la atención eran más bien por anhelos profundos del alma, así que mis correos eran un poco extensos en ellos contaba también de mis anhelos de santidad, de mi insatisfacción de las cosas que ofrece el mundo y en alguno incluso contaba de algún encuentro espiritual muy intenso que tuve una vez en un Santísimo, pero al chico del helado fueron solo unas 4 líneas en las que solo le decía mi nombre y que quizá podríamos ser amigos y claro el remate ideal "podríamos ser amigos, aunque no me gusta el helado". Y no es broma, no es que no me guste, pero aun no sé cuando es que dejé de comer dulces, en fin...
Ese correo lo envié el 15 de enero de este año, y anoche ya conversaba con él sobre el anillo, la pedida de mano, el compromiso, su padres, los míos y etc.
Primero que nada para mi descubrir la web, me confirmó que hay otras personas con anhelos parecidos a los míos, personas que consideran que el matrimonio es para siempre aunque sea muy difícil, que perdonar es posible y tener hijos es una gran responsabilidad y un don divino.
Han pasado tantas cosas en mi interior desde el 15 de enero, he vivido tan intensamente estos meses, que a veces recordando me emociono y se me acelera el corazón, aun no puedo creer que el amor exista y sea tanto tanto tanto.
Comenzamos a escribirnos nos mandábamos correos, yo esperaba siempre su respuesta antes de enviarle otra carta; a las 2 semanas de mandarnos un correo se fue de vacaciones con su familia; y no me animaba a escribirle, a veces lograba ver que él entraba a mirar su correo, lo veía activo, pero no me escribía y yo tampoco a él, me daba como roche hacerlo, hasta que un día no me aguante más tenía como 5 días sin saber de él y le escribí contándole mi día de oficina, algunas cosas, nada particular, y él me contestó cortito y me decía "yo también te he extrañado".... y yo me aterré, leí mi carta la releí buscando cuando le dije "te extraño" y felizmente no encontré esas palabras en ninguna parte, pero él lo sabía algo de lo que escribí o quizá la forma en que le escribí le hizo notarlo, y fue como el destape a una forma nueva de relación, una en la que uno dice efectivamente lo que siente en cada momento.
Al poco tiempo compré mi web cam, y luego mi lap top, pues entre mi mami y mis hermanos nos turnábamos la compu, y pues llegó un momento en que yo quería hablar con él cada noche, así que la necesidad me hizo buscar mayores comodidades para esta relación.
Un día me dijo que quería venir a verme, que quería conocerme y que cerca de mi cumpleaños le parecía ideal, así que unos pocos días de mi cumple fui a recogerlo al aeropuerto, el primer encuentro no fue todo lo que esperábamos, pero ya más tranquilos en un café ese mismo día, nos dimos nuestro primer besito y nos dijimos cuánto nos queríamos.
Parece simple ahora en el papel, pero son miles de sentimientos y de pensamientos encontrados en mi; de las cosas que más me preocupan son mis temas laborales, me preocupa ni satisfacción profesional, me preocupa la distancia que habrá con mi familia, pero amo tanto a Carlos que sé que podré con todo eso, por una simple razón él es mi compañero, él es el hombre con el que he decidido pasar el resto de mi vida, con el que he decidido formar una familia y con el que quiero ser santa.
Respecto a sus colores, pues es blanco cuando está fresco(digamos que recién bañado), es poco uniforme cuando lo lleno de mis amigos, es rosado cuando recién sale del avión, es rojo luego de subir las escaleras de 7 pisos; es de un color indescifrable cuando no me entiende, del color más lindo y tierno del mundo cuando se engríe, de color intenso cuando me mira con sus ojazos y me dice te amo... aun hay miles de colores suyos que no conozco, pero los voy descubriendo con paciencia y con cariño.